lunes, 19 de mayo de 2008

Dudas sobre el semen

Dudas sobre el semen


La eyaculación de semen no es sinónimo de orgasmo, aunque normalmente los dos fenómenos están asociados. Puede existir eyaculación sin orgasmo, y orgasmo sin eyaculación. No existe tampoco relación con la impotencia o disfunción eréctil.
La emisión de semen en las relaciones sexuales o con la masturbación, no desgasta la vitalidad del hombre ni disminuye la producción de semen.
El semen no siempre se expulsa por el pene, puede existir una eyaculación retrógrada (dentro de la vejiga urinaria).
La fuerza de eyaculación y la cantidad del semen eyaculado no son indicadores de virilidad. Más bien están relacionados con factores psicológicos y fisiológicos (por ejemplo, la intensidad de la relación sexual).
El semen puede ser objeto de juego erótico en muchas parejas.
La ingesta de semen no engorda ni es nociva, a menos que el emisor padezca una enfermedad infectocontagiosa. Se inactiva instantáneamente, desde el punto de vista fecundativo, tras ser expuesto al ambiente.
El contacto del semen con el ojo irrita la conjuntiva y puede producir molestias al cabo de unos minutos, que desaparecen en unas horas. En caso de semen infectado con gonococos puede producirse una conjuntivitis gonocócica que debe ser tratada con antibióticos. Los ojos pueden ser una vía de entrada del VIH (causante del sida).
El semen varia ligeramente de color y textura de hombre a hombre, así como la cantiad del mismo expulsado en la eyaculación.
Obtenido de "http://es.wikipedia.org/wiki/Semen"

Comportamiento sexual y semen

Comportamiento sexual y semen

Todos los comportamientos sexuales que conllevan el contacto del semen con la vulva o la vagina, pueden provocar un embarazo. Entre los métodos anticonceptivos que evitan este contacto se encuentran:
La vasectomía.
El condón o preservativo.
El coitus interruptus o "marcha atrás", siendo este un método poco efectivo, debido a la secreción previa a la eyaculación del líquido preseminal.
En algunas culturas se le ha atribuido al semen propiedades especiales de masculinidad, hasta tal punto que en algunos pueblos del Pacífico Sur creían que la ingestión de semen por los adolescentes era necesario para adquirir la maduración sexual. Sin embargo, esta práctica puede transmitir múltiples enfermedades de transmisión sexual.

Lugar de formación del semen

Lugar de formación del semen


Los lugares donde se forma el semen son:
Túbulos seminíferos de los testículos: aquí se forman los espermatozoides durante un proceso que se llama espermatogénesis, influido por una hormona llamada testosterona y por la FSH. Al principio los espermatozoides carecen de movilidad y avanzan gracias a los movimientos peristálticos de estos túbulos. Pero según van avanzando, se van diferenciando y adquieren movilidad.
Epidídimo: aquí los espermatozoides son retenidos durante mucho tiempo, incluso semanas, recorriendo su trayecto largo y tortuoso lentamente e impulsados por las contracciones peristálticas del músculo liso de la pared de este conducto. En el epidídimo los espermatozoides aumentan su capacidad fertilizante. Es el lugar principal de almacenamiento de los gametos masculinos.
Conductos deferentes: apenas contienen espermatozoides. Su función, con su gruesa capa muscular, es la de transportar rápidamente el semen durante el coito, hacia la uretra.
Vesículas seminales: producen una densa secreción que contribuye de manera muy importante al volumen del eyaculado, que oscila entre el 46% y el 80%, siendo la última parte del semen en salir en una eyaculación. Esta secreción es rica en fructosa, que es el azúcar principal del semen y proporciona los hidratos de carbono utilizados como fuente de energía de los espermatozoides móviles. También contiene pequeñas cantidades de un pigmento amarillo, flavinas en su mayor parte, que aportan al semen una fuerte fluorescencia a la luz ultravioleta, que tiene mucho interés en medicina legal para la detección de manchas de semen en una violación.
Próstata: aporta la segunda parte del contenido del semen en una cantidad abundante que oscila entre el 13% y el 33% del volumen total del eyaculado. El líquido prostático es rico en enzimas fosfatasas y en ácido cítrico. La próstata produce el fosfato de espermina, un compuesto poliamínico presente en cantidad abundante en el semen humano. Cuando el semen se enfría y comienza a secarse, esta sustancia forma los cristales de Böttcher.
Uretra bulbar: contiene las glándulas de Cowper y Littré que también secretan un líquido lubricante al semen, poco abundante pero rico en mucoproteínas, siendo la primera parte del eyaculado. Facilitan la lubricación de la uretra que recorre el pene para el paso del semen a gran velocidad hacia el exterior, gracias a la contracción de los músculos bulbouretrales.
Cuando se realiza una prostatectomía radical en caso de un cáncer de próstata, se extirpa la próstata, las vesículas seminales y se ligan los conductos deferentes. El semen producido en las gónadas masculinas, se acumula en el epidídimo y conductos deferentes, reabsorbiéndose allí mismo. En estos casos, en caso de coito, no existe eyaculación, lo que se llama 'orgasmo seco'.

Edad de producción del semen

Edad de producción del semen


El semen comienza a producirse a partir de la pubertad y tiene las características del adulto a partir de los 11-14 años en la mayoría de los adolescentes. La cantidad producida aumenta con la edad hasta un nivel máximo que depende de cada individuo, luego disminuye a medida que el varón envejece, no obstante, se produce semen durante toda la vida adulta del varón.

Composición del semen

Composición del semen
Menos de 10% del volumen del semen de una eyaculación corresponde a los espermatozoides, y más de 90% al líquido seminal. La densidad de espermatozoides en el semen varía de 50 a 150 millones por mililitro, por lo que cada eyaculación contiene entre 200 y 400 millones de ellos.
Entre los elementos que componen al semen se encuentran los líquidos que aporta la vesícula seminal:
fructosa,
aminoácidos,
fósforo,
potasio y
hormonas.
La próstata aporta de 15 a 30 por ciento del plasma seminal:
ácido cítrico,
L-Carnitina,
fosfatasa alcalina,
calcio,
sodio,
zinc,
potasio,
enzimas para la separación de las proteínas y fibrolisina (una enzima que reduce la sangre y las fibras del tejido).
El último elemento que se agrega al semen es un fluido que secretan las glándulas uretrales y bulbouretrales, una proteína espesa, clara y lubricante conocida como moco.

Características del semen

Características del semen
El volumen medio de semen de una eyaculación es de 3 a 5 mililitros, con máximo de 15 ml, depende mucho de la abstinencia sexual previa, del grado de excitación durante la actividad sexual.
El cuerpo humano elimina periódicamente el semen almacenado. Si no se eyacula durante un tiempo, se suelen producir poluciones nocturnas.
El color del semen es normalmente blancuzco o blanco lechoso. Si el líquido eyaculado presenta un color anaranjado o rojizo puede que contenga sangre, signo que se conoce como hematospermia, que puede indicar un trastorno urológico.
El semen suele tener una consistencia de coágulo, debido a la facilidad de solidificación que posee gracias al fosfato de espermina. Es frecuente la aparición de grumos más sólidos, pero ello no es indicativo de ninguna clase de problemas.
El olor y el sabor del semen es peculiar y variable en cada individuo dependiendo de múltiples factores. Son características con un gran componente subjetivo y emocional. Para unas personas es desagradable y para otras es excitante. Algunas personas reconocen un sabor dulzón y afrutado, debido a las proteínas alcalinas. El aroma puede ser muy intenso.
El pH del semen es de 7,5.
Menos del 10% del volumen del semen de una eyaculación corresponde a los espermatozoides.
Más del 90% del volumen del semen de una eyaculación corresponde al líquido seminal.
La densidad normal de los espermatozoides en el semen varía de 50 a 150 millones por mililitro, por lo que cada eyaculación contiene entre 200 y 400 millones de espermatozoides. Para que se produzca la fecundación del óvulo el semen debe contener más de 20 millones de espermatozoides por mililitro. Por debajo de esta cifra se habla de esterilidad o infertilidad masculina.
El semen contiene algunas otras células, desprendidas del epitelio de los conductos excretores y de la uretra.
En caso de infección del organismo, el semen puede llegar a contener altas concentraciones de virus o gérmenes como por ejemplo el VIH (que provoca el sida), por lo que ante relaciones sexuales promiscuas el método de protección más efectivo es el de barrera (condón o preservativo).
El análisis de los espermatozoides del semen se llama espermiograma (también se usan espermograma y seminograma).
Debido a la composición del semen, en condiciones adecuadas, los espermatozoides pueden permanecer vivos fuera del organismo durante varios días. También sobreviven durante cierto tiempo en los conductos excretores después de la muerte del varón. Se han llegado a encontrar gametos masculinos vivos en la trompa de Falopio y en el útero de la mujer varios días después del coito. Pueden almacenarse en estado congelado con nitrógeno líquido durante meses o años ya que mantienen su capacidad fertilizante tras la congelación o criopreservación. Debido a esta última característica es posible la inseminación artificial y la fecundación in vitro con semen congelado o criopreservado. Muchas personas con cáncer testicular han podido tener descendencia posteriormente, criopreservando su semen antes del tratamiento.

Espermatobioscopia

Espermatobioscopia

Espermatozoides al microscopio óptico X 640.
Se debe considerar que las muestras fluctúan en un rango que varía de miembro a miembro, el tiempo de abstinencia y detalles finos en la colección, así como el intervalo de tiempo entre la obtención y el procesamiento de la muestra; los anteriores son factores que pueden hacer variar los resultados. Nunca se deberá establecer un diagnóstico con la evaluación de una muestra. Son necesarias cuando menos dos o tres más para establecer un diagnóstico certero.
Los parámetros que se evalúan en la espermatobioscopía son: el volumen de la muestra, el número de espermas que contiene cada mililitro, el porcentaje de ellos que presentan movilidad o mala, buena, muy buena o nula movilidad; también el porcentaje de espermas cuya anatomía es anormal (morfología) y el número total de espermas móviles útiles.
En algunos casos, cuando se ha demostrado alguna anomalía, existen pruebas especiales que permiten profundizar el funcionamiento espermático, tales como la "reacción acrosomal", la prueba de "sobre-vivencia espermática" y la de "penetración en huevo de Hamster".